
Siempre he dicho que tengo el corazón dividido. Soy Catalana y amo mi tierra hasta las trancas, pero Extremadura es la tierra de mi madre y he pasado allí los momentos más felices de mi vida.
Podría decir mil cosas sobre la belleza de Extremadura, sus rincones naturales, sus gargantas de agua, tierra de venaos y belloteros, de ruinas romanas y de jaras... Pero hoy hablaré de su gastronomía. En concreto de las migas extremeñas.
El pan que se consume en mi pueblo en Cáceres, es un pan grueso, con una corteza muy fina y con mucha miga. Es un pan demasiado grueso y pesado para hacer bocadillos por ejemplo, pero para las migas es ideal.
(Cuando hago las migas en Barcelona, el pan que utilizo es el pan de pagès de tres o cuatro días, cortado en rebanadas).
Así es como se hacen las migas en mi familia:
Necesitamos para 5 o 6 personas, un
pan grande tipo pagès o de pueblo.
Una cabeza de
ajosAceite de oliva
una cucharada de
pimentón de la verachorizo, panceta...lo que queramos echarle de la matanza
4
pimientos verdes5 o 6
sardinas (opcional)un
huevo frito por persona (opcional)
leche de cabra (opcional)
miel (opcional)
Vamos mojando las rebanadas por las dos caras, pero muy levemente. No se trata de empapar el pan para luego escurrirlo, sino de mojar superficialmente cada cara durante un segundo y ya está. O sea, meter y sacar la rebanada rápidamente como aquél que dice. De esta forma, iremos desmenuzando el pan sobre una olla, formando así las migas.

Si alguna corteza se nos resiste, siempre podemos remojar unos segundos más hasta que nos sea fácil desmenuzarla con las manos.
Cuando ya tenemos todo el pan listo, pelamos y cortamos en rodajas 6 o 7 ajos que mezclaremos bien con las migas. Y esto lo tenemos que
dejar reposar toda la noche.
Las migas nunca deberán estar secas.
Siempre húmedas, pero no mojadas.
Al día siguiente, cogemos una paellera grande y profunda, y echa

mos bastante aceite. En él freiremos dos o tres dientes de ajo y antes de que se doren demasiado, los retiramos. En ese mismo aceite, freimos unos trozos de panceta y chorizo, y hasta morcilla si se desea, evitando que se desmenuce en el aceite (se pondría negro).
Retiramos el chorizo y la panceta en un plato con papel absorvente, y echamos pimentón dulce al aceite donde los hemos frito. Removemos, y rápidamente echamos las migas en la paellera, sin parar de remover todo el tiempo. Es muy importante,
no parar de remover. Esto evitará que las migas se apelmacen, y queden sueltas como han de quedar.
Importante también que
no queden fritas, ni crujientes ni nada de eso.
En una sartén a parte, freímos unos trozos de pimiento verde y luego unas sardinas. Todo esto (el chorizo, panceta, sardina, pimientos...)lo vamos colocando en platitos encima de la mesa, para que cada cual se sirva lo que quiera en su plato de migas.
Servimos las migas en platos o en cazuelitas de barro. Es muy típico en algunos restaurantes de Cáceres, servir también un huevo frito sobre las migas.
Las migas extremeñas no se sirven acompañadas de sardinas. Esto es algo más típico de las zonas costeras. A mí me encantan las sardinas con las migas.

Y por último, os contaré cómo acostumbran a comer las migas en algunas pequeñas aldeas cacereñas más tradicionales, como la de mi madre. Mis tios, siempre sirven en la mesa una taza de leche tibia de cabra, y otra taza con miel.
Cuando les quedan la mitad de las migas en el plato (y sin carnes de ningún tipo), se hacen unas sopas bañándolas con la leche. Tal vez parezca extraño, pero os aseguro que para los extremeños no lo es, pues su sabor es lo más parecido al "
ajocano", unas sopas de pan y leche cuya receta ya daré otro día, y que fue comida de pastores muy tradicional en Extremadura.

Mi prima Eva, sin embargo, cuando ya le quedan unas pocas migas en el plato, les echa miel.
Yo he cogido esta tradición de ellos, pero hago mi propia mezcla: baño las migas en leche y agrego miel, y de esta forma me preparo el postre. Os aseguro que a mí me sabe a gloria.
Nota: las migas dan mucha sed. Con el pimiento verde se consigue darles jugosidad. Yo aconsejo no prescindir de él, además de preparar una gran ensalada de lechuga y tomate, que ayudará a que las migas pasen mejor.
BON PROFIT!!